Con la llegada del calor llegan las vacaciones de verano. Después de pasar meses en el interior, atrapado en sus compromisos diarios, finalmente puede desconectarse y recuperar el aliento.
Para los estudiantes, el verano es sinónimo de relajación. Una vez que terminan las lecciones, tareas y exámenes, es hora de resumir y finalmente cerrar el año.
El verano es también el momento en que las actividades diarias entran en modo de espera. Durante el año escolar, los estudiantes dedican su tiempo a un deporte o pasatiempo.
Pero incluso para estas actividades ha llegado el momento de detenerse.
Con todo este tiempo libre disponible, ¿qué hacer?
Bueno, seguramente es correcto descansar un poco. Después de todo, para sus hijos, ya no hay un despertador que los empuje a levantarse de la cama todas las mañanas. Pueden disfrutar de unas horas más de sueño, tomarse el tiempo para desayunar y empezar el día con serenidad. Tener más tiempo disponible para ti es una buena oportunidad para iniciar actividades postergadas durante el año escolar.
Libres de estrés y llenos de energía, pueden dedicarse a algo productivo.
El verano puede ser un buen momento para mejorar tu inglés y progresar. No es ningún secreto que cuando estás descansado rindes más y es más fácil para tu mente aprender y absorber nuevos estímulos.
Por lo tanto, podría ser la temporada ideal para dedicarse al inglés. Puede hacerlo usted mismo de varias maneras, como usar una aplicación en su teléfono inteligente o ver películas o leer libros en inglés.
Pero si realmente quiere que sus hijos pasen al siguiente nivel, asistir a una clase es la mejor opción. Veamos cuáles son las opciones para aprovechar al máximo tus cursos de inglés de verano y por qué unas vacaciones en inglés son la mejor solución.
Los cursos de inglés de verano en una escuela son una de las alternativas más comunes para mejorar tu inglés durante el verano. Como no hay compromisos escolares, puedes asistir a clases con más tranquilidad. Estos cursos tienen lugar en el aula, junto con otros estudiantes. Son adecuados para niños menos tímidos, que no tienen miedo de hablar en público, aunque no conozcan el idioma. Las lecciones siguen un programa estándar, diseñado para satisfacer las necesidades generales de capacitación. Esto significa que es posible que no cumplan plenamente con los objetivos de aprendizaje o mejora del idioma. Además, los ritmos de enseñanza pueden no coincidir con los personales.
Debido a la pandemia, la educación a distancia ha progresado mucho en los últimos dos años. Online, existen cursos con profesores nativos que pueden ayudar al alumno a mejorar su pronunciación y acento.
La oferta es amplia y hay cursos de varios tipos y duraciones. Un curso de inglés de verano en línea tiene la ventaja de que se puede tomar desde cualquier lugar. Por lo tanto, incluso si las vacaciones en la playa ya están reservadas, es posible continuar con las lecciones. Además, cuesta menos que una escuela. Sin embargo, puede que no sea la solución ideal para los jóvenes menos disciplinados. En el verano es fácil disfrutar de un ritmo de vida más relajado y ser demasiado indulgente contigo mismo.
Los cursos de inglés de verano en línea son flexibles por naturaleza, pero esta flexibilidad no es una ventaja si a sus hijos les falta disciplina. Además, hay menos herramientas para comprobar el progreso y la eficacia de la enseñanza. En pocas palabras, existe el riesgo de no tomarse el compromiso en serio.
Si sus hijos no quieren mudarse de casa este verano, es posible que desee considerar las clases privadas. Un curso de inglés de verano con un profesor particular se puede realizar desde casa decidiendo libremente el horario de las clases. Se pueden establecer objetivos específicos, el número de lecciones y los temas a tratar. Las lecciones generalmente se llevan a cabo cara a cara, hablando solo en inglés. Sin embargo, es una alternativa más cara que las demás. Además, las lecciones se imparten durante unas pocas horas a la semana, y esto puede no ser suficiente para avanzar en el aprendizaje o perfeccionamiento del idioma.
Si quieres que tus hijos suban de nivel, unas vacaciones en inglés son la mejor solución. Hablar correctamente un segundo idioma no es fácil, pero con dedicación se pueden lograr excelentes resultados en poco tiempo.
Una estancia en inglés ofrece ventajas que los cursos de inglés de verano no pueden ofrecer. En primer lugar, puedes asistir a clases con profesores nativos y con alumnos de todo el mundo. Mantenerse en contacto durante un período de tiempo con personas que solo hablan inglés conduce a un progreso más rápido. Tras los primeros resultados, también mejorará la confianza en las propias capacidades, y esto tendrá un efecto positivo en el propio aprendizaje.
Además, puede captar los matices lingüísticos que los cursos estándar no enseñan. Por matices lingüísticos nos referimos no solo a la pronunciación y el acento, sino también a las expresiones idiomáticas y la construcción de oraciones típicas de los hablantes nativos.
Estos matices se incorporarán al habla personal y el inglés de sus hijos sonará mucho más profesional. Por lo tanto, tomar un curso de inglés de verano en el extranjero es una alternativa más útil a los cursos tradicionales en tu propio país.
Otro beneficio de unas vacaciones en inglés es el descubrimiento de una nueva cultura, nuevos paisajes y nuevas personas. Todo ello redundará en un enriquecimiento cultural para tus hijos, que se volverán más independientes y seguros de sí mismos.
Irlanda es uno de los mejores lugares para alojarse en inglés. La cultura, el clima y los paisajes naturales lo convierten en un escenario perfecto para aprender inglés durante el verano. Con Hebe puedes elegir un gran número de familias disponibles para alojar a tus hijos durante el verano. Razón de más para estar inmerso en la cultura irlandesa y hablar el idioma a tiempo completo.
Las familias anfitrionas son seleccionadas por Hebe para ofrecer seguridad y confianza a los padres del estudiante. Hebe también brinda la posibilidad de comunicarse con las familias anfitrionas, para que los padres puedan estar tranquilos durante las vacaciones.
Así que si quieres estar seguro de que tus hijos mejoran su inglés, una estancia de estudios en Irlanda es uno de los mejores regalos que puedes hacerles.